sábado, septiembre 28, 2024
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Colaboradores

¿QUÉ QUIERO COMUNICAR HOY?

Ocho pasos para comunicar una Imagen de poder”.

¡Hola, amigos y amigas de Dinero y Negocios! Sean bienvenidos de nuevo y muchas gracias por permitirme continuar con nuestra experiencia de comunicación en esta exitosa publicación. En esta ocasión quiero referirme a uno de los componentes más relevantes de la comunicación no verbal por su impacto en la percepción de la gente, en especial en el mundo de los negocios: el lenguaje corporal cuando caminamos.

Según nos señala el profesor Albert Mehrabian, psicólogo especialista en comunicación humana de la Universidad de California, la componente no verbal comprende el 55 % de la totalidad de nuestra comunicación; es decir, nuestros gestos y movimientos comunican más que lo que decimos (7 %) y cómo lo decimos (38 %); ¿qué les parece?

En un futuro podemos revisar más a detalle la relación y el correcto balance entre comunicación verbal y no verbal para transmitir adecuadamente un mensaje. Hoy nos enfocaremos en los movimientos que hacemos al caminar como parte de la comunicación no verbal, o lenguaje corporal, y cómo podemos impactar e impresionar a un cliente al hacerle una presentación, a un grupo de personas al exponer en una junta o a una gran audiencia en un escenario, simplemente por la forma como nos movemos frente a ellos y ellas.

Yo parto de una premisa muy simple: una persona, hombre o mujer, que camina “bien”, es decir, que biomecánicamente se mueve de manera eficiente y natural, y que en su caminar manifieste actitud de seguridad, entusiasmo y hasta autoridad, llama mucho la atención porque, lamentablemente, la mayor parte de la gente camina “mal”. Pero ¿cómo es esto? Resulta que en nuestro caminar reflejamos no sólo lesiones físicas y malos hábitos de movimiento corporal que hemos adquirido a lo largo del tiempo, sino también lesiones emocionales y malos hábitos de actitud. En pocas palabras, en nuestra forma de caminar reflejamos mucho de nuestra actitud ante la vida, de nuestra autoconfianza o falta de ella, y de nuestro temor o gusto por interactuar con la gente. Ejemplos de esto los vemos por docenas todos los días: personas que caminan encorvadas, cabizbajos, que arrastran los pies, etc.

Pero la buena noticia es que, así como inconscientemente adquirimos malos hábitos de postura y movimiento a través de los años, podemos reeducar y mejorar nuestro cuerpo y nuestra actitud en poco tiempo con un buen trabajo de análisis personal y trabajo consciente. Y para esto, me permito compartir ocho parámetros que, estoy seguro, les parecerán simples, prácticos y, lo mejor, que podrán ver resultados positivos en muy poco tiempo.

1.- Relajación – Cerrar los ojos un momento, respirar suave y profundamente durante algunos segundos y dejar que la mente racional ponga la emoción bajo control cada vez que me siento tenso; es decir, hacer un breve análisis racional de la situación para disminuir la ansiedad, me ayuda a moverme de manera más suave y natural, comunicando a los demás confianza y relajado entusiasmo por seguir adelante.

2.- Flexibilización – Hacer ejercicio regularmente o, al menos, mover mis brazos y piernas con frecuencia (no estar horas sentado o parado), hacer flexiones y ejercitar mis articulaciones en general permite que al caminar me mueva con naturalidad y ligereza, comunicando que soy una persona en forma y con fuerza.

3.- Balance gravitacional – El mover la cabeza y los hombros de lado a lado al caminar, como si fuera un péndulo humano, comunica una falta de condición física y/o una actitud de inseguridad o de falta de seriedad. Caminar “derecho y sin bambolearse” por el pasillo de la oficina comunica autoridad y seguridad.

4.- Paralelismo – Caminar con la cabeza inclinada hacia un lado o mirando hacia el suelo, puede comunicar tristeza, debilidad o inseguridad. En el otro extremo, caminar con la cabeza altiva, es decir, viendo a los demás “por encima del hombro” puede comunicar soberbia. Para esto, imagino que hay una línea horizontal frente a mis ojos que debe ser paralela a la línea del suelo. Esto permite que me acostumbre a caminar con la cabeza erguida, no altiva ni cabizbajo, lo cual abre canales de comunicación porque me permite ver a la gente a los ojos… y si esto lo complemento con una sonrisa; ¡mucho mejor!

5.- Alineación – Caminar con los pies apuntando hacia adelante, no hacia los lados “como pato”, aparte de que me permite avanzar más rápida y eficientemente (con menos esfuerzo físico), comunica fuerza y autoridad.

6.- Tracción – De los malos hábitos al caminar, creo que arrastrar los pies es el peor, porque da una terrible imagen de pereza, tristeza o falta de voluntad; la persona que arrastra los pies parece que se ha rendido ante la vida. En cambio, caminar separando los pies del suelo de manera armónica y firme comunica energía y actitud de seguridad y entusiasmo ante los retos cotidianos.

7.- Erección – Caminar erguido, se supone, es una de las principales diferencias físicas que el ser humano tiene con los primates en general. Además de favorecer la salud física al no encorvar la columna, caminar erguido comunica autoconfianza y genera respeto.

8.- Continuidad – Caminar moviendo el torso hacia arriba y hacia abajo, como un barco subiendo y bajando en las olas, además de que consume mucha energía física, da una imagen de descuido, de poco interés en uno mismo y, por ende, de poco interés por los retos de la vida. Para esto, imagino que tengo un gis o un lápiz sobre mi cabeza de oreja a oreja y que estoy caminando junto a una pared blanca, de forma que el lápiz toca la pared; la meta es dibujar una línea lo más recta posible. El caminar dando la impresión de un movimiento continuo, sin subir y bajar la cabeza, comunica autocontrol, fuerza y disciplina.

Les invito a revisar cada uno de estos parámetros, uno a la vez con tranquilidad y entusiasmo, hacer poco a poco las correcciones necesarias y les garantizo que en poco tiempo se sentirán con más energía física y con una actitud de seguridad, autoridad y triunfo ante los retos del negocio y de la vida… y lo más importante es que la gente a su alrededor notará esta actitud y reaccionarán positivamente en consecuencia.

TEAMWORK!